La experiencia positiva de la DO Valdeorras en Fenavin
La Denominación de Origen Valdeorras acudió a la edición de 2015 de FENAVIN, la Feria Nacional del Vino en Ciudad Real entre el 12 y el 14 de mayo. El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Valdeorras apostó por su presencia en una muestra imprescindible que, tal y como se encarga de destacar la propia organización de la misma, “se ha especializado en el negocio exterior, una proyección internacional que permite que la oferta vinícola española pueda estar presente en los mercados más importantes”. De este modo, la institución tiene delegaciones distribuidas por todo el mundo: en 2013 trabajaron 3.052 compradores procedentes de 58 países y la participación de 659 de ellos fue gestionada directamente por la organización. Se realizaron 166.790 contactos comerciales. Pero esa vocación por el negocio de la iniciativa presta también un especial cuidado hacia el comprador nacional. Tanto es así que en la pasada edición fueron 9.778 los que trabajaron intensamente durante los tres días de feria”.
La D.O. Valdeorras compartió esta iniciativa, vocación y objetivos de una manera especial con las otras denominaciones gallegas, Monterrei, Rías Baixas, Ribera Sacra y Ribeiro.
Para José Vicente Solarat López, presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Valdeorras, fue su primera feria desde que accedió recientemente al cargo. Por eso valoró la efemérides de una forma especial: “Que tu primera feria, y la primera en la que eres por tanto portador de las bondades de una denominación de origen como la nuestra, sea una de las muestras más importantes de Europa siempre es algo satisfactorio, muy satisfactorio. Hacerlo en compañía de nuestras cuatro DO gallegas hermanas y de algunas de las bodegas que forman parte de nuestro organismo, y en vista también del excelente momento del vino gallego y el reconocimiento al mismo, es una satisfacción añadida”.
Solarat consideró “un auténtico privilegio” representar a una institución ancestral que aúna los valores de una tierra y sus gentes y que, además, tiene la extraordinaria posibilidad de “contar con un preciado tesoro. Disponemos únicamente de 30 millones de copas, 14 de ellas de nuestro Godello, para todo el mundo”.
